El presidente ruso, Vladimir Putin, vuelve a desafiar a Occidente, al asegurar que las fuerzas de Moscú seguirán probando su nuevo misil hipersónico Oreshnik en combate y que tiene un arsenal listo para su uso.
Sus declaraciones llegan en medio de la alerta un día después de que Rusia lanzara un ataque contra Dnipro, Ucrania, con un misil balístico hipersónico, como lo describió, aunque inicialmente Kiev señaló que se trataba de un misil balístico intercontinental (ICBM).
«Continuaremos con estas pruebas, incluso en condiciones de combate, dependiendo de la situación y la naturaleza de las amenazas a la seguridad que se creen para Rusia», afirmó Putin en comentarios televisados a funcionarios de defensa y desarrolladores de misiles.
El Kremlin subrayó horas antes que el ataque con ese tipo de misil fue una advertencia a los aliados occidentales por autorizar a Kiev utilizar sus misiles para apuntar contra suelo ruso.
France24.com